¿Qué es la discopatía degenerariva?
La discopatía degenerativa es una patología producida por el desgaste de los discos intervertebrales y es la causa más común de dolor lumbar.
El Doctor Javier Pizones nos cuenta cómo te podemos ayudar.
Causas de la discopatía degenerativa
El hombre está diseñado para caminar sobre sus cuatro extremidades, y como los grandes simios, erguirse en momentos puntuales. Sin embargo, hemos desarrollado la capacidad de ponernos de pie, caminar y correr manteniendo la espalda recta. Esto produce un aumento de la fuerza que soporta el final de la espalda llevándonos a un desgaste temprano de los “muelles” por donde se dobla la espalda. Es más, forzamos desde bien temprano a doblar la espalda tomando como bisagras las caderas y a coger pesos. Esto provoca que estos “muelles”, llamados discos intervertebrales, se den de sí y acaben desgastándose.
Las principales causas de la discopatía degenerativa lumbar son:
- Deterioro de los discos intervertebrales
- Lesiones de espalda
- Envejecimiento
- Malas posturas estáticas
- Malas posturas al levantar peso
- Sedentarismo
Síntomas del desgaste de los discos intervertebrales
El desgaste de los discos comienza normalmente entre los 30-35 años. Produce un dolor lumbar sordo, continuo y molesto que baja por las nalgas hasta la parte inferior y posterior de los muslos. A veces se irradia a los trocánteres y a las ingles. Es frecuente que nos produzca episodios agudos de dolor (lumbalgia) que no suelen sobrepasar los tres meses de duración. Este proceso es tan frecuente que se calcula que el 90% de la población va a padecer al menos una vez en su vida un dolor de estas características.
Las principales síntomas de la discopatía degenerativa son:
- Dolor lumbar
- Dolor en el cuello
- Entumecimiento y hormigueo en piernas y glúteos
- Molestias y dificultades al andar
Diagnóstico de la discopatía degenerativa
Las radiografías nos dan pistas de si un disco puede o no estar desgastado por la disminución de la altura del mismo. Cuando un disco ya no funciona bien, acaba alterando las articulaciones de las vértebras (facetas) dando un dolor a punta de dedo en la zona central y baja de la espalda.
Podemos diagnosticar el estado de un disco con la resonancia magnética (RM) o el scanner (TAC). Aunque ambas pruebas solo están indicadas en el caso de que los dolores sobrepasen unos determinados límites o sus características hagan sospechar al médico que no se trate de una simple lumbalgia mecánica. No siempre está indicada su prescripción.
La RM muestra un disco sano cuando es ovalado, blanco y tiene límites bien diferenciados. Un disco de color gris o negro, en principio, significa que está empezando su desgaste. Se comporta como un globo, así pues disminuye de altura y se aplasta, sobresaliendo por los “polos”. La parte que sobresale hacia el canal por el cual pasan los nervios hacia las piernas se llama “protusión”.
Tratamiento para el desgaste de los discos intervertebrales
El tratamiento en los casos de lumbalgia es conservador y se fundamenta en tres pilares:
La higiene postural
No agacharse con la espalda, sino siempre flexionando las rodillas con la espalda recta; no coger pesos, y de hacerse, hacerlo siempre acercando el paso al cuerpo sin hacer palanca doblando las rodillas; no inclinarse hacia delante sin apoyar las manos (por ejemplo hacer camas, lavar platos a mano…).
El ejercicio aeróbico
Es fundamental potenciar los abdominales y las lumbares. Para ello, el mejor ejercicio es la bicicleta estática, la natación a espaldas, el pilates o el yoga. Para los más mayores se recomienda la gimnasia de mantenimiento. Caminar es algo saludable para la salud en general, pero no es específico para prevenir el dolor de espalda, no es suficiente para hacer que alguien mejore.
La medicación
Tomar de manera regular medicación contra el dolor que nos paute el médico. Muchas veces extendemos el tratamiento meses, pero esto debe de estar siempre vigilado por un doctor.
El calor local también viene bien para aliviar el dolor, al igual que el reposo en cama semirígida con una almohada de pequeño grosor.
Si el tratamiento no nos mejora se puede optar por la rehabilitación o por técnicas de la unidad del dolor. La cirugía no suele ser la solución al problema, por lo que no se suele ofrecer como alternativa a esta patología.
En Clínica DKF en El Viso (Chamartín) de Madrid contamos con una Unidad de Columna especializada en el tratamiento de la discopatía degenerativa. Consulta con nuestro especialista en traumatología de columna cómo te podemos ayudar.