
El método Pilates fue creado por Joseph Pilates en el siglo XX. Uno de los principios básicos del método Pilates es fortalecer la musculatura estabilizadora del cuerpo. Se trabaja el abdomen, la musculatura lumbar, los glúteos y el suelo pélvico. El método Pilates se basa en la estabilización y el control motor de estos grupos musculares con el fin de mejorar la postura, el equilibrio y la flexibilidad. Además, otro de los principios básicos del método Pilates es la prevención de lesiones que puedan derivar del sedentarismo o deportivas. Se aconseja complementarlo con otra actividad física.
Clases de pilates
En Clínica DKF tenemos sesiones de Pilates cada semana. Se trabaja en grupos reducidos de un máximo de 4 personas o, también se puede realziar de manera individual. En cualquier caso, se adaptan los grupos y las clases a las características de cada persona. Para ello, se realizará una valoración inicial. En ella, se busca conocer el estado físico de la persona y las patologías previas, así como enseñar los principios básicos del método Pilates, a partir de los cuales poder progresar con seguridad y sin riesgo de lesión.
¿Cuáles son los principios básicos del método Pilates?
1. Concentración.
Es básica a la hora de ejecutar los movimientos. concentración en la ejecución de los movimientos es fundamental. El Pilates trabaja combinando tres elementos: la respiración, la corrección postural y la precisión en los ejercicios. Para poder combinar estos elementos es fundamental estar concentrado en todo momento.
2. Control.
Al método Pilates se le denomina también “contrology” o “contrología”. El control motor de los movimientos es fundamental para la correcta realización de los ejercicios. Este control, junto a la concentración, va a permitir que los movimientos se realicen de manera armónica y precisa, manteniendo una correcta alineación de la columna a través de la activación de los músculos estabilizadores.
3. Precisión.
Para conseguir la precisión en la ejecución de los movimientos, hay que controlar los músculos estabilizadores. Todo movimiento preciso que realiza nuestro cuerpo tiene como base una correcta estabilización de las articulaciones previas. La realización de los ejercicios planteados con precisión va a llevar asociada la correcta estabilización a través de la musculatura, cumpliendo así uno de los objetivos del método.
4. Fluidez de movimiento.
El dominio en el control de los movimientos se transforma en la fluidez durante su realización. Cuando falta control y precisión, los movimientos se realizan de manera entrecortada o con sensación de rigidez. Conseguir realizar los movimientos con fluidez indicará su correcta ejecución.
5. Respiración.
La respiración es uno de los principios fundamentales del método Pilates. Cada ejercicio tiene una respiración diferentes, pero todos ellos cuentan con un patrón respiratorio repetido. Una buena respiración es la base para realizar correctamente los movimientos de los ejercicios. Evitar cortar la respiración es muy importante para lograr el control de la musculatura del CORE, que es la base de la estabilidad de los movimientos.
6. Centralización.
El centro, que se conoce como CORE, está formado por la zona abdominal, la columna lumbar, la musculatura pélvica y el diafragma. La musculatura implicada en estas áreas es sobre la que se sustenta el método Pilates y que hace posible cumplir con cada uno de sus principios. Sin control del centro (CORE) no hay fluidez, precisión o control de los movimientos.