Seguramente hayas oído hablar de la fascitis plantar en algún momento. Quizás la conoces no sólo de oídas, sino que también la has sufrido. En este nuevo post del blog de Clínica DKF, te contaremos, de una forma sencilla y comprensible, la patología de la fascitis plantar y algunas opciones recomendables para su tratamiento.
Qué es la fascitis plantar
La fascitis plantar se caracteriza por un dolor punzante en la zona del talón y la cara interna de la planta del pie. Suele aparecer con los primeros pasos tras un periodo de reposo y se agrava con la marcha prolongada o cargas de peso. Aunque se suele relacionar con el deporte, también puede aparecer en la población que no realiza ejercicio.
Los factores de riesgo que más se relacionan con la fascitis plantar son:
- La disminución de la movilidad en flexión del tobillo.
- Un índice de masa corporal elevado en personas sedentarias.
- Correr como actividad física con regularidad.
- Actividades laborales que impliquen carga de peso.
- La presencia de pie plano y/o pronado.
- La falta de fuerza en la musculatura de la pierna.
Los síntomas de esta patología tan molesta se han asociado a una inflamación de la fascia plantar. Estaes la zona de la planta del pie que va desde el talón hasta debajo de los dedos. Sin embargo, también se han observado cambios en la estructura microscópica y engrosamiento de la zona de inserción en el calcáneo, que es el hueso que forma el talón. Hablaríamos entonces de fascitis plantar.
Existe una falsa creencia que afirma que el espolón calcáneo es la causa de la talagia (dolor en el talón), pero se ha demostrado que esta ocurre por consecuencia de la inflamación crónica de la fascia.
Se trata de una patología muy limitante por el gran dolor que provoca, el cual se prolonga en ocasiones durante más de 12 meses.
Tratamientos para la fascitis plantar
La identificación y corrección de los factores de riesgo que influyen en la fascitis plantar, así como la combinación de varios tratamientos para atenderla, favorecen una recuperación rápida y mantenida en el tiempo en gran número de casos.
A continuación, se describen los principales tratamientos que han demostrado su eficacia para disminuir los plazos de recuperación:
Terapia manual
La terapia manual ha demostrado su eficacia en la disminución de los plazos de recuperación a través de la combinación de diferentes técnicas:
- La realización de técnicas manuales sobre tejidos blandos o la mejora de la flexibilidad tanto de la musculatura plantar como de la parte posterior de la pierna mediante estiramientos.
- Las técnicas de movilización articular del tobillo tienen como objetivo recuperar la movilidad completa del tobillo, incidiendo principalmente en la flexión dorsal, tanto en descarga como en las situaciones habituales de carga.
Ondas de choque focales y ondas de presión radiales
Las ondas de choque focales han demostrado mejorar la función y el dolor en casos de fascitis plantar con una tasa de éxito del 72,1%. Además del efecto analgésico y antiinflamatorio, se obtiene un efecto biológico que favorece la regeneración de los tejidos. El tratamiento consta de 3 sesiones con un intervalo entre ellas de una semana, en las que se aplican las ondas de focales con la guía ecográfica.
La aplicación de las ondas de choque radiales se ha comparado con la infiltración de corticoides y con la cirugía, consiguiendo un efecto más prolongado en el tiempo y un menor riesgo de complicaciones. En todo caso, se observa una mayor eficacia de la aplicación de onda de choque focal respecto a la radial.
Es un tratamiento que no requiere de preparación previa, es ambulatorio y las complicaciones son mínimas. Únicamente se limita la actividad deportiva durante el tiempo del tratamiento, pudiendo mantener la fisioterapia.
Soporte plantar u ortesis plantar (plantillas funcionales)
Según la literatura científica, la asociación de la fasciopatía o fascitis plantar con alteraciones de la mecánica del pie tiene que ver con la disminución del movimiento de flexión dorsal de la primera articulación metatarsofalángica, lo que hace que traccione la fascia en su inserción en el talón en su fascículo medial. A este respecto, también hay que valorar neutralizar la postura del pie. Por ello, es importante realizar un estudio biomecánico para valorar la necesidad de prescribir un soporte plantar, ya que el tratamiento ortopodólogico constituye otra parte fundamental en el tratamiento de esta dolencia.
Ejercicio terapéutico
La evidencia en torno a la eficacia del ejercicio terapéutico en la fascitis plantar es variable debido a la variedad de los protocolos de fortalecimiento aplicados. Sin embargo, hay estudios que han observado una reducción del dolor relacionado con la fascitis plantar al realizar un protocolo específico de fortalecimiento.
El fortalecimiento de la musculatura abductora y rotadora externa de cadera también se recomienda en casos de patología de miembro inferior, ya que se ha observado una mejora en la realización de actividades de carga de peso. Además, se ha observado el beneficio del fortalecimiento de la musculatura que previene la pronación del pie.
Otros tratamientos en casos refractarios a las ondas de choque, la fisioterapia y la corrección ortésica son los biológicos. Técnica que se basa en la obtención de forma autóloga de las plaquetas de la sangre del paciente y se aplican mediante infiltración ecoguiada en área estéril.
En Clínica DKF contamos con un equipo multidisciplinar liderado por la Dra. Freitag, en el que podemos abordar la fascitis plantar de manera global y profesional, puesto que disponemos de la posibilidad de realizar todos los tratamientos previamente descritos.