Las ondas de choque extracorpóreas son un tratamiento eficaz y consolidado para tratar las afecciones tendinosas, ya sean calcificantes o no, que se han hecho crónicas y que no responden a otros tratamientos (farmacológicos, fisioterapéuticos o con infiltraciones).
El tratamiento tiene muchas ventajas, ya que no requiere de ninguna preparación previa y se obtienen más del 90% de buenos resultados en tendinopatías calcificantes y entre el 80 y el 85% en las crónicas sin depósito cálcico. Producen un alivio sintomático al finalizar el tratamiento, que se realiza en muy poco tiempo y no requiere realizar ninguna recuperación especial tras el mismo. Es una opción no farmacológica, evitando así el uso de anti-inflamatorios y analgésicos. Además evita el deterioro de las estructuras microfibrilares y las roturas intratendinosas.
Este tratamiento también se utiliza para la fascitis plantar, el codo de tenista o golfista y para mejorar los dolores crónicos.
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