La Neuropsicología en Clínica DKF

Desde Clínica DKF, y gracias a la incorporación a nuestro equipo del prestigioso neuropsicólogo el Dr. Miguel Ángel Fernández Blázquez, queremos darle la visibilidad y la importancia que tiene la neuropsicología, una disciplina esencial para todas aquellas personas afectadas por trastornos neurológicos y psicológicos.

La neuropsicología es una disciplina científica relativamente joven que se enmarca en la Psicología y la Neurociencia enfocándose en el estudio de la relación entre la estructura y función del sistema nervioso y el comportamiento humano. Entre las funciones del neuropsicólogo clínico pueden destacarse las siguientes:

• Evaluación: realización de una valoración exhaustiva del paciente, incluyendo las dimensiones cognitiva, emocional, comportamental y adaptativa. Para ello, el neuropsicólogo puede recoger información del paciente a partir de fuentes tan diversas como la entrevista clínica, la revisión de informes médicos, la observación conductual, la aplicación de cuestionarios o la realización de diferentes tests de rendimiento cognitivo.
• Diagnóstico: a partir de la información obtenida durante la evaluación, el neuropsicólogo formula un juicio clínico razonado. En dicho juicio se incluye tanto la descripción pormenorizada de las capacidades conservadas y alteradas en el paciente como el diagnóstico de los trastornos neurológicos o neuropsiquiátricos que pudieran estar presentes.
• Tratamiento: diseño, puesta en marcha y monitorización continua de programas de intervención personalizados. El objetivo último de la intervención neuropsicológica consiste en mejorar la calidad de vida de los pacientes y de sus familias, lo que en la mayor parte de las ocasiones se consigue a través del entrenamiento y/o rehabilitación de las habilidades cognitivas, emocionales y conductuales.
• Psicoeducación: constituye una tarea importante dentro del trabajo cotidiano del neuropsicólogo la aportación de información a pacientes y familiares en relación con las singularidades y el pronóstico esperado para su caso particular, así como las pautas y recomendaciones de intervención pertinentes. Toda esta información deberá ser siempre veraz, estar basada en la evidencia científica disponible y adaptarse a las circunstancias de cada paciente para que sea inteligible.
• Colaboración: por lo general, para garantizar una atención integral y coordinada del paciente, el neuropsicólogo deberá comunicarse de manera eficiente con profesionales de otras disciplinas sanitarias (por ejemplo, neurólogos, psiquiatras, radiólogos, terapeutas ocupacionales, logopedas, etc.) o de otros ámbitos (por ejemplo, maestros, educadores sociales, trabajadores sociales, etc.).

Aplicaciones clínicas

Por otro lado, a través de la evaluación y tratamiento de todo tipo de problemas neurológicos y psicológicos, la neuropsicología tiene una gran cantidad de aplicaciones clínicas. Una de las aplicaciones más comunes es el diagnóstico y tratamiento de trastornos neurológicos como el daño cerebral traumático, la epilepsia, la esclerosis múltiple, la demencia o el accidente cerebrovascular, entre otros. En todos estos trastornos, la figura profesional del neuropsicólogo clínico se encarga de realizar evaluaciones neuropsicológicas con el propósito de identificar qué áreas se encuentran afectadas en el paciente y determinar cómo están afectando a su comportamiento y función cognitiva. Con toda esta información se pueden desarrollar planes de tratamiento personalizados con el fin de mejorar la calidad de vida de la persona.

Asimismo, la neuropsicología puede resultar de utilidad en el diagnóstico y tratamiento de algunos trastornos psicológicos como la depresión, la ansiedad o la esquizofrenia. En estos casos, los neuropsicólogos clínicos llevan a cabo evaluaciones centradas en determinar si existe algún componente neurológico que contribuya a la manifestación de los síntomas psicológicos. Además, pueden planificarse programas de intervención individualizados con el fin de incrementar el rendimiento cognitivo del paciente, así como mejorar su capacidad de adaptación al medio.

Otro campo de aplicación importante para la neuropsicología clínica lo constituye el ámbito infanto-juvenil, donde los neuropsicólogos pueden ayudar a los niños con dificultades de aprendizaje y trastornos del desarrollo, como el trastorno del espectro autista, el trastorno en la lectoescritura o el trastorno por déficit de atención e hiperactividad. En general, los neuropsicólogos trabajan con profesores y padres para desarrollar estrategias de enseñanza efectivas y crear un ambiente de aprendizaje lo más favorable posible para el niño.

En resumen, la neuropsicología clínica es una disciplina esencial en la atención médica y la salud mental, que brinda una comprensión profunda de la función cerebral y su relación con el comportamiento, las emociones y la función cognitiva. Dicha comprensión, en última instancia, persigue mejorar la calidad de vida de las personas afectadas por trastornos neurológicos y psicológicos.

El Dr. Miguel Ángel Fernández, especialista en intervención neuropsicológica en pacientes con todo tipo de patologías de cualquier edad, velará por ofrecer a cada paciente el mejor tratamiento.

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