¿Qué es el codo de tenista?
El dolor en la cara lateral del codo, asociada a la fuerza de prensión y a la utilización de la mano en gestos cotidianos es lo que se conoce como epicondalgía, comúnmente llamado epicondilitis.
Se trata de la patología más frecuente del codo. Prevalece especialmente en personas que practican un deporte de raqueta o presentan actividades laborales que requieren movimientos manuales que suelen combinar fuerza y actos repetitivos.
¿Cuáles son las causas del codo de tenista?
La causa principal de la aparición de una epicondilitis es el resultado de un exceso de carga de los tendones extensores en la práctica de deportes de raqueta o de algún otro deporte o de algún oficio que exijan al codo una sobrecarga repetitiva.
Este exceso se puede producir de forma puntual o por microtraumatismos repetidos. La evolución a largo plazo puede producir pequeñas roturas o calcificaciones intratendinosas.
La incidencia mayor se produce en hombres y mujeres con edades comprendidas entre los 30 y los 60 años, siendo más frecuente en varones.
¿Cuáles son los síntomas del codo de tenista?
Los signos clínicos son los siguientes:
- Dolor incesante y paulatino en la parte externa del codo cuando se llevan a cabo actividades rutinarias con el brazo.
- Dolor y dificultad para extender la muñeca y hacer supinación del antebrazo.
- Rigidez y problemas para mover el codo y las manos.
- Dolor a la palpación en el área epicondílea.
Se puede cronificar si persiste durante más de tres meses.
Se trata de una patología con un alto grado de recaída y con tiempos de recuperación que se encuentran entre los 6 y los 24 meses.
Diagnóstico del codo de tenista
El médico especialista en la Unidad de Hombro y Codo es quien ha de acometer un examen físico exhaustivo con tests determinados. Se solicitan radiografías y ecografías como mejor método de imagen para establecer un diagnóstico correcto.
Tratamiento del codo de tenista
El tratamiento no quirúrgico del codo de tenista se sustenta en los siguientes consejos en pro de disminuir la inflamación y fortalecer los músculos y tendones:
- Limitar las acciones causantes del dolor; reduciendo el tiempo, el grado de intensidad y realizando descansos y estiramientos.
- Aplicar hielo en la zona inflamada tres o cuatro veces al día durante veinte minutos.
- Ingesta de medicamentos antiinflamatorios, previa prescripción médica.
- Terapia de ondas de choque como una de las indicaciones aprobadas por la Sociedad Internacional y aportar mejor riego para añadir células reparadoras y es la mejor opción terapéutica a largo plazo.
- Infiltraciones con terapias biológicas.
- Ejercicios de fisioterapia con el fin de fortalecer los músculos y tendones del antebrazo.
- Ante la presencia de un dolor intenso y una impotencia funcional grande, la terapia manual ha demostrado disminuir el dolor y mejorar la fuerza de prensión a corto plazo, cuando ésta se dirige tanto a la región del codo como a nivel de la muñeca y de la región cervical.
Si el tratamiento no invasivo no da resultado en el paciente transcurridos seis meses, el facultativo podrá valorar si conviene optar por una intervención quirúrgica mínimamente invasiva.
¿Cómo prevenir el codo de tenista?
Existen una serie de pautas que pueden servirnos para evitar que se presente la dolencia de codo de tenista:
- Seleccionar el material adecuado para practicar deporte, por ejemplo, en el caso del tenis resulta fundamental optar por una raqueta que no sea demasiado ancha, ni estrecha y por pelotas que no resulten muy pesadas.
- Recurrir al asesoramiento del médico deportivo correspondiente para aplicar técnicas que no supongan un sobresfuerzo de los tendones a la hora de hacer deporte.
- Si aparece dolor tras permanecer durante horas trabajando frente al ordenador, conviene revisar la ergonomía en el puesto de trabajo y la postura a la hora de sentarnos y escribir.
Si padece o cree padecer la patología de codo de tenista, no dude en contactar con Clínica DKF para concertar una cita y ser atendido por nuestra Unidad de Hombro y Codo.