
El dolor lumbar es una de las dolencias más comunes en la población mundial, afectando a un alto porcentaje de personas en algún momento de sus vidas. Comprender sus causas y las estrategias para abordarlo es importante para mejorar nuestra calidad de vida.
Causas del dolor lumbar
El dolor lumbar puede deberse a múltiples factores que afectan la estructura y función de la columna vertebral. Uno de los principales motivos es la degeneración discal, un proceso natural asociado al envejecimiento en el que los discos intervertebrales pierden flexibilidad y capacidad de amortiguación, generando dolor y rigidez en la zona lumbar.
Otra causa frecuente es la hernia discal, que ocurre cuando el núcleo de un disco se desplaza y presiona los nervios cercanos, provocando dolor que puede irradiarse hacia las extremidades. También, la estenosis espinal, caracterizada por el estrechamiento del canal espinal, puede comprimir la médula y los nervios, generando molestias, debilidad y limitación de movimientos.
Además, factores mecánicos y posturales como el sedentarismo, las malas posturas y la falta de ejercicio pueden aumentar la tensión en la zona lumbar y predisponer a la aparición de dolor crónico.
El exceso de peso también es un factor de riesgo importante, ya que incrementa la carga sobre la columna vertebral y puede acelerar el desgaste de las estructuras óseas y musculares de la zona lumbar.
Cómo evitar el dolor lumbar
- Ejercicio y actividad física: la actividad física es fundamental para prevenir y tratar el dolor lumbar. Ejercicios de fortalecimiento muscular, y actividades aeróbicas ayudan a mejorar la flexibilidad, la fuerza y la resistencia de la columna vertebral.
- Terapias físicas: la fisioterapia, puede aliviar el dolor y mejorar la función lumbar.
- Control del peso: mantener un peso saludable reduce la carga sobre la columna y disminuye el riesgo de desarrollar dolor lumbar.
- Educación postural: aprender y mantener posturas correctas en actividades diarias y laborales es esencial para prevenir el dolor lumbar.
- Cirugía: es una opción en casos severos o cuando hay compresión nerviosa significativa que no mejora con otros tratamientos.
En Clínica DKF, la Unidad de Columna, aborda el dolor lumbar con un enfoque personalizado que incluye diagnóstico y tratamientos no invasivos.
Además, nuestros servicios integran fisioterapia y un equipo multidisciplinar que trabaja en la recuperación y prevención, proporcionando un tratamiento integral para la lumbalgia y promoviendo una mejor calidad de vida para nuestros pacientes.