¿PODEMOS SABER SI SU HÍGADO ESTÁ SANO?
El hígado es un órgano muy silencioso. La mayoría de sus enfermedades cursan de forma asintomática. En muchas ocasiones, los primeros síntomas aparecen en fases ya muy avanzadas. Solo podemos saber con garantías que el hígado está sano tras una consulta y examen físico minucioso por un hepatólogo (especialista en enfermedades del hígado y conductos biliares). Con el objetivo de encontrar algún posible problema se deberá llevar a cabo una analítica específica y una ecografía con varias determinaciones y mediciones no habituales para, entre otras, estudiar la circulación de la sangre en el abdomen y detectar posibles cicatrices (fibrosis) en el hígado. En muchas ocasiones, una simple analítica (transaminasas y bilirrubina) es útil para detectar anomalías muy evidentes y claras, pero no es suficiente para valorar con detalle ni suficiente certeza y seguridad como se encuentra este órgano, tan importante para la vida y bienestar del paciente.
¿QUÉ SÍNTOMAS PRODUCEN LAS ENFERMEDADES DEL HÍGADO?
Las enfermedades más conocidas como el hígado graso, las hepatitis o la cirrosis suelen cursar de forma asintomática. En algunos casos puede haber cansancio excesivo o molestias en la parte superior derecha del abdomen. En otros, el paciente puede ponerse amarillo (piel, interior de boca y parte blanca de los ojos). Esto último, es un dato típico de enfermedad del hígado, pero puede verse tanto en enfermedades de poca importancia y pocos días de duración como en enfermedades muy graves. Otros síntomas típicos de fallo en la función hepática, son la acumulación de líquido en el abdomen, alteraciones en la función cerebral (desde alteraciones muy leves al coma profundo), sangrados digestivos y alteraciones de la coagulación sanguínea, entre otras. Cuando aparecen, indican enfermedad avanzada, pero la medicina del siglo XXI dispone de múltiples métodos para detectar alteraciones en fases mucho más tempranas y así poder evitar que se llegue a esa situación. También existen tratamientos específicos para cada problema, y esto debería ser valorado por un hepatólogo experimentado.
¿ES REALMENTE UN ÓRGANO IMPORTANTE?
El hígado es el órgano más voluminoso del cuerpo humano y sus funciones serian equivalentes a las de un gran laboratorio o una gran fábrica. La forma de entender la importancia que tiene es ver lo que ocurre cuando deja de funcionar súbitamente, sin que dé tiempo a que el cuerpo se acomode a los cambios. Básicamente, si esto ocurre, y el paciente no recibe un trasplante de hígado urgente, fallan después prácticamente todos los aparatos y sistemas del organismo. Afortunadamente, esta situación es muy rara y suele aparecer por sobredosis de algunos medicamentos, ingesta de setas venenosas o algunos virus. Este órgano es tan resistente que puede llegar a autorepararse, regenerarse o resolver los problemas que tenga, siendo tremendamente resistente y en muchos casos no presenta síntomas hasta que ya no puede más y existe bastante daño acumulado.
¿HAY MUCHOS MITOS FALSOS SOBRE EL HÍGADO?
Debido a lo complejo que es el funcionamiento del hígado y a la necesidad de una gran especialización por parte de los especialistas, es frecuente que algunos detalles no sean detectados por muchos médicos. Sabiendo esto, es fácil imaginar la cantidad de mitos incorrectos que circulan por internet, televisión, literatura no científica o pseudocientífica e incluso que promulgan algunos profesionales de la salud y que no guardan relación alguna con el funcionamiento del hígado. Algunas de los más conocidos y extendidos son:
- La limpieza del hígado, de la vesícula biliar o eliminación de toxinas para curar una u otra dolencia.
- Lesiones del hígado sin relevancia frecuentemente se siguen y controlan con pruebas de imagen durante años, con un coste psicológico y económico importante.
- La relación del alcohol y los fármacos, sobre todo con los antibióticos, con enfermedades hepáticas, existiendo muchas afirmaciones y recomendaciones que no se basan en ningún dato conocido o simplemente no interpretado correctamente.
- La relación de la cirrosis con el alcoholismo. Una gran parte de la población asocia la palabra cirrosis a alcoholismo. No solo el alcohol, sino cualquier enfermedad del hígado de duración prolongada pueden provocar una cirrosis. También existen personas que no siendo alcohólicos desarrollan una cirrosis hepática por efectos del alcohol.
¿QUÉ PUEDE HACER LA CLÍNICA DKF POR LA SALUD DE MI HÍGADO?
En Clínica DKF disponemos no solo de los medios para diagnosticar y tratar los problemas habituales sino también tecnología punta para realizar diagnósticos más complejos y precisos y así establecer el tratamiento correcto y poder informar al paciente con claridad y seguridad sobre su hígado.
Por todo lo anterior es necesario que sea un especialista en el hígado el que le informe sobre cualquier duda que tenga, estudie cualquier síntoma o le ofrezca una segunda opinión, si lo precisa.
En Clínica DKF el mismo Hepatólogo se ocupará de su caso de principio a fin y le realizará prácticamente todos los estudios o procedimientos que precise para un seguimiento integral y personal.
En caso de precisar la opinión de otros médicos nos ocupamos de ponerle en contacto mediante carta personal para que le puedan ver únicamente los mayores expertos en ese tema a nivel nacional o internacional, según lo que precise el paciente y la importancia de cada caso.
En nuestra clínica aplicamos a cada paciente todos nuestros recursos que precise para brindarle la mejor atención posible y poder solucionar su problema de la forma más rápida y eficaz.
Además en Clínica DKF se fomenta la investigación clínica de los problemas que tratamos, se aplican los últimos tratamientos existentes y colaboramos con asociaciones de pacientes y sociedades científicas para mantenernos al nivel de excelencia que existen en los mejores centros y que creemos que debemos aportar a nuestros pacientes.